El hombre del maletín

Viernes 24 de Agosto de 2007

AMALIO (MAYITO) SOLANO

Sucedió en Buenos Aires-Argentina, estando el presidente Hugo Chávez en ese país, cuando estalló el escándalo que sorprendió a todos los venezolanos, menos al canciller Nicolás Maduro, porque según él esto “ocurre en todos los países del mundo”.

Aquella madrugada del día sábado 4 de agosto del 2007 llegaron a Buenos Aires (en la Cesna, aeronave considerada como una joya de la aeronáutica, contratada por Enarsa, empresa estatal de ese país), los argentinos Beresiuk, Uberti, Espinosa y los venezolanos Cardozo, Uscátegui, Ávila y Guido Antonini Wilson. Este último era quien portaba la famosa maleta contentiva de los 790.550 dólares, aunque en los titulares de los periódicos se habla de 800.000 dólares.

El caso es que este señor al llegar a ese país, en la aduana le decomisan un maletín full de billetes verdes y no fue detenido, ya que según el funcionario Echegaray, no suele detenerse a las personas que intentan introducir mercancías sin ocultamiento, “esto no significa un ardid o engaño al control aduanero”, dijo.

Este suceso causó la destitución de funcionarios argentinos como Claudio Uberti, quien fuera titular del Órgano de Control de Concesiones Viales de Argentina y era el principal negociador en los contratos petroleros con Venezuela y fue la persona que autorizó el ingreso al avión del empresario venezolano Guido Antonini Wilson.

El presidente Hugo Chávez firmaba unos acuerdos en materia energética con su homólogo Néstor Kirchner en ese país, cuando se enteró del caso que ha dado bastante para escribir. El mandatario venezolano dijo que el empresario Guido Antonini no formaba parte de su comitiva.

Argentina pidió a Venezuela una explicación por este escándalo. Mientras que el venezolano Rodrigo Cabeza, titular de Finanzas, en su declaración a la prensa dijo: “Que se investigue y caiga quien caiga…El Ejecutivo Nacional no tiene en esta materia nada que ver”.

Kirchner también dijo: “Nosotros no tenemos nada que ver…” y agregó: “Todos sabrán quienes dicen la verdad y quienes mienten”.

El ministro de planificación argentino, al ser consultado por los periodistas, declaró que “Son ellos (¿se refería a los venezolanos?) los que tienen que pedir disculpa”. Y el canciller Nicolás Maduro, al ser abordado por los periodistas en la sede donde se celebra la III Cumbre de PetroCaribe, preguntó “¿por qué se arma el escándalo?” y finalizó diciendo “La mano peluda del imperio se encuentra en este incidente”.

Guido Antonini, de 46 años de edad, reside en los Estados Unidos y prometió llamar en cuanto llegara a su casa, porque según él “se están diciendo muchas estupideces en Buenos Aires”. Ahora, su abogado argentino Guillermo Draletti, quien prepara la defensa, declaró al periódico “La Nación” que el empresario viajó a la Argentina “para comprar un inmueble muy importante y que los vendedores le habían pedido una seña en efectivo” ¿Costaría el “inmueble importante” esa cantidad de dólares, o sería para realizar los trámites necesarios para dicha compra? La verdad, Antonini, que con esa “bola de billetes” en ese maletín, nos podemos imaginar cualquier cantidad de “estupideces”.

Cuando suceden casos como este, se dicen cosas como estas. Por ejemplo, Henry Ramos Allup dijo: “Ese hecho se conoce porque reventó en Argentina”. Manuel Rosales: “¡Ojalá y le tiraran a El Cantón (en Barinas) un maletincito de eso”! Rafael Ramírez: “Lamentable”. Roberto Hernández: “Deben ser botados de Pdvsa. No tienen por qué andar con un delincuente”. Señores, por lo visto este trompo tiene bastante largo el guaral.

No puede ser que unos funcionarios estén de acuerdo en que se investigue este bochornoso caso y otros digan cosas para culpar a la prensa por lo que allí se escribe. Cierto o no, hay que investigar. El gobierno tiene que hacerlo, Pdvsa no puede dejar que esto pase sin que se diga la verdad y mucho menos llegar al guabineo. Aunque desde el gobierno se diga que no “tiene nada que ver con esto”, creo que sí tiene que esclarecer este hecho, porque hay trabajadores de Pdvsa así no sea de la alta gerencia.

Señor presidente Hugo Chávez, si estas personas resultaren culpables en este escándalo, anúncielo al país, como lo hizo una vez con los trabajadores de la cuarta República que le hicieron la huelga en Pdvsa y usted en su programa “Aló Presidente” iba diciendo por ejemplo: Maria Fulano, usted está botada; José Fulanito, fuera, José Perendejo y Carlos Guabino ustedes están botados. Hágalo con estas personas u otras que sean declarados culpables por hechos de corrupción, que son los que le hacen daño a su gobierno revolucionario.

Según la prensa argentina, el empresario venezolano Guido Antonini realizó 12 viajes a ese país. Me cabe entonces el beneficio de la duda. Puedo pensar que en esos viajes llevaba dólares que en un momento dado no fueron detectados, o que estos serían los primeros que se entregarían a alguien o también que podía ser el pago de algo que no está claro todavía.

Podemos seguir pensando “estupideces”; pero la verdad es que la seña fue captada por los trabajadores de la aduana del aeropuerto Jorge Newberry en Buenos Aires, y aún así el hombre pudo llegar a su home en los Estados Unidos. Ahora las autoridades de Argentina pidieron su captura en el ámbito internacional.

Bien por ese país, porque hay muchos puntos oscuros que se le deben meter la linterna y Venezuela no puede quedarse con los brazos cruzados ante este reprochable caso.

Ah, me enteré antes de cerrar este artículo que Diego Uscátegui Mateus renunció a su cargo en Pdvsa para facilitar la investigación. Lo mejor que hizo. ¿Renunciarán otros? Amanecerá y sabremos.