domingo, 5 de septiembre de 2010

Aquella madrugada

Viernes 23 de Mayo de 2008

AMALIO (MAYITO) SOLANO

Cuando los gallos cantaban lejos de la comunidad del Core 8 en Puerto Ordaz, cuando el rocío caía sigilosamente sobre el techo de las casas y la noche cabalgaba sobre el lomo de la brisa sin la luz de la luna en la ciudad, nadie se imaginaba lo que en la madrugada podía suceder.

Ninguna persona de la comunidad llegó a pensar que en el vientre de la noche cuando Yajaira Lisbeth Franco Suárez y su compañero Leinis Abelino Flores Acuña dormían plácidamente o, tal vez, conversaban lo que harían al amanecer de un nuevo día, que unos sujetos, a bordo de un fiat de color azul sin placas, esperaban con la mayor paciencia y sin desesperase, que la noche siguiera su rumbo hasta que se hiciera la una de la madrugada para interrumpir la tranquilidad de ese hogar acabando con la vida de la pajera.

A esos sujetos no les importó la presencia de la niña, hija del matrimonio Flores Franco, para descargar sus armas en la humanidad de los padres de la pequeña, que como pudo, salió corriendo hasta la casa de su abuela materna para hacerle saber lo que sucedía.

Los familiares acudieron de inmediato y encontraron los cuerpos ensangrentados y sin signo vitales. Leinis estaba frente a la habitación y Yajaira adentro. De pronto se oyeron los gritos de una madre desesperada que no encontraba qué hacer al ver a su hija y a su yerno muertos en un charco de sangre.

Su llanto, como eco, se escuchó en el lugar y sus lágrimas caían sobre el cuerpo de su hija. Los vecinos dijeron que escucharon doce disparos, pero no se atrevieron a salir por temor a que tomaran represalias contra ellos.

La pareja tenía dos años alquilando en ese sector y la joven madre, de 26 años de edad, esperaba su título de bachiller para estudiar en la universidad, mientras su esposo, de 29 años, era mecánico.

Llevaban ocho años casados y habían procreado a una niña a la cual le hacían su vida color de rosa. Siete años pudo la pequeña disfrutar del amor de sus padres hasta que esos desadaptados acabaron con sus vidas aquella madrugada del 14 de abril del 2008.

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