viernes, 18 de junio de 2010

Misión Contra Corruptos

Publicado
Viernes 19 de Febrero de 2010
AMALIO (MAYITO) SOLANO

Para la construcción del centro odontológico, que lleva el nombre de Luis Hurtado Higuera, el señor Gonzalo Velásquez, contralor social, junto con las señoras Rosa Cortés, finanza, Graciela Quiñate y Ramona García del Comité de Tierra Urbana, realizaron el proyecto el cual fue introducido en la alcaldía y la gobernación de cuyas entidades no recibieron respuestas. Pero la insistencia de este grupo de personas preocupadas por el bienestar y la salud de los habitantes del barrio Luis Hurtado Higuera, aprovecharon el momento cuando el gobernador Francisco Rangel Gómez se encontraba en el estacionamiento del estadio La Ceiba de San Félix, en un Mega Mercal.

Allí fue una comisión del Consejo Comunal para hablar con él y le entregaron una carta. El Gobernador les dijo que les daría la ayuda en cuanto a la construcción del centro odontológico. También se quedaron esperando, y viendo que el tiempo pasaba y ninguna cooperativa se presentaba para la construcción de la obra, los integrantes del Consejo Comunal se volvieron a presentar en el segundo Mega Mercal y nuevamente se entrevistaron con el Gobernador. En esta oportunidad envió al comisionado a entrevistarse con ellos.

El abogado se presentó y ellos le informaron de que tenían un “espacio cuadrante” disponible para la construcción de ese centro odontológico. Desde la gobernación le enviaron una cooperativa, pero cuando Gonzalo le solicitó el presupuesto al responsable de la construcción, éste se negó a mostrárselo y a entregarle una copia del mismo. Para el contralor social esto era muy importante, el presupuesto era un aval, ya que se lo mostraría a la comunidad, a la Gobernación o al gobierno central si era necesario.

El representante de la cooperativa se negó rotundamente y ellos no le permitieron comenzar la obra. Luego trajeron otra cooperativa y el trabajo tampoco se pudo ejecutar porque ante los representantes de la comunidad, ellos alegaron que era muy poco lo que la Gobernación les había ofrecido.La tercera cooperativa se ofreció para hacer el trabajo con lo que le habían ofrecido a la anterior (30 mil bolívares fuertes). Los del Consejo Comunal aceptaron y comenzaron a ejecutar la obra. “Rompieron el piso, taparon los huecos y al final dejaron la obra a media”.

Desde entonces pasaron tres meses parados.Gonzalo decidió dirigirle una carta a Inviobras Bolívar, para que vinieran a inspeccionar lo que había hecho la cooperativa. Tampoco recibió respuesta.El Consejo Comunal tuvo la oportunidad de reunirse con la Procuraduría General de la República, establecido en Ciudad Guayana; y una representante les dijo que ella los podía ayudar en esa parte. Nuevamente elaboran una carta especificándoles todo lo que necesitaban y esta carta le fue entregada directamente al gobernador del estado Bolívar Francisco Rangel Gómez.Cuando él leyó la carta, quedó sorprendido, pensó que esta obra ya estaba culminada.

Entonces llamaron al representante de la misma cooperativa que había dejado el trabajo a media y fue obligado a dirigirse hasta la casa del señor Gonzalo, para que conversara con él. Este le explicó la situación y el motivo por la que no habían terminado la obra y le pidió que le diera la oportunidad de terminarla. Esto motivó una discusión entre ellos y al final se pusieron de acuerdo.Cuando la cooperativa terminó el centro odontológico, el dueño de la misma le entregó la carta de culminación de la obra al contralor social para que se la firmara.

El contralor, Gonzalo Velásquez, comenzó a leer y se dio cuenta que todos los materiales estaban “sobre pasados”. Esto le llamó la atención que quedó sorprendido porque donde utilizaron 200 tabelones, colocaron en su informe 500 y donde gastaron 60 sacos de cementos, colocaron 120. Desde luego los integrantes del Consejo Comunal no estuvieron de acuerdo con este informe y copia de este le fue remitida al Gobernador, mientras que el equipamiento del local se logró a través de la Procuraduría.

En este centro de la Misión Barrio Adentro, trabajan dos hermanos odontólogos, de nombres Yoiny y Jhonny de la Nuez Bermúdez, de nacionalidad cubana.El consultorio está dotado de dos sillones de última generación, un aire acondicionado, techo raso, estanterías para medicinas y enseres quirúrgicos, un baño, aguas negras y blancas; un esterilizador y piso de vinil. El horario de atención al público es de 8:00 am a 12:00 pm y de 12:30 pm a 4:30 pm.La construcción del local tuvo un costo de 30 mil bolívares fuertes y está ubicado en el mismo local del Centro Comunal.

Actualmente se hace diligencia para anexarle dos habitaciones para los médicos. Con la culminación de esta pequeña obra, hoy se beneficia una comunidad de cerca de ocho mil personas después de que el Consejo Comunal pasara por una y mil trabas donde pudimos ver la irresponsabilidad de las personas al no entregar una carta, al engañar a la comunidad, al gobernador y al no responderle al Consejo Comunal que muchas veces se quedó esperando una respuesta.

Así, como también, la irresponsabilidad de las cooperativas o los representantes de las mismas al comprometerse para realizar un trabajo y no terminarlo, porque se apropiaban del dinero. ¿Hasta cuándo tenemos que vivir esta realidad mientras los corruptos gozan una bola de fútbol y otra de basket? Sinceramente este es el peor de los males junto con el de la inseguridad que existe en el gobierno del presidente Hugo Chávez.

Si esto pasó, con esa pequeña cantidad de dinero, ¿qué será de aquellos que administran grandes cantidades? No quiero decir que todos sean corruptos, pero habrá que crear una misión contra ellos. Que bueno que le pusieran Misión Lupa Carcelaria. Esta se encargaría de llevar presos a todos los corruptos sin excepción; haría que devuelvan el dinero robado y le expropiaran todos los bienes adquiridos, porque de lo contrario ellos acabarán con el país en las narices del comandante Chávez, y entonces adiós socialismo, adiós revolución.

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